Barbie - Aún Joven y Fabulosa a los 60

Rubia y coqueta, con un rostro y silueta inconfundibles aún después de décadas de evolución - sólo una muñeca se ha convertido en sinónimo de ‘chica bonita’ a través del mundo.

Amada y odiada, elogiada y vilipendiada, Barbie rara vez ha dejado a alguien indiferente desde su introducción al mercado de los juguetes hace ya sesenta años este mes.

Creada por la co-funadora de Mattel, Ruth Handler, ésta notó que su hija, Barbara, tenía opciones limitadas de juguetes con los cuales jugar, y todos la constreñían en los roles prototípicos de madre y ama de casa.

Consciente de que las sensibilidades sociales estaban cambiando, Ruth ideó el concepto de una muñeca adulta, glamorosa e independiente, cosmopolita y viajera, modelada en base a la muñeca alemana “Bild Lilli” de 1955, la que a su vez estaba basada en un cómic aparecido en la revista ‘Bild’.
                           
En realidad, aunque la mayoría de las muñecas de la época replicaban las formas de bebés y niños pequeños, las muñecas de papel - especialmente pensadas para mostrar una variedad de diseños de vestuario - habían existido desde hacía décadas.

Muñecas de papel de Grace Kelly, c. 1950

El verdadero logro de Barbie fue transportar el glamour de las muñecas de papel a una forma tridimensional.

Cuando Barbie fue presentada durante la Feria Internacional de Juguetes de Nueva York el 9 de Marzo de 1959, fue vista como una revolución. Y el momento era el indicado para ella.

Aunque los roles estereotípicos de madre y esposa aún dominaban las imágenes femeninas en los medios, y las bellezas rubias como Grace Kelly y Marilyn Monroe aún eran la regla, cambios tales como el movimiento de los derechos civiles, la revolución sexual y el movimiento de los derechos de la mujer estaban a la vuelta de la esquina.

Barbie y Ken, c.1961

En este contexto, la promesa de una chica linda, glamorosa y liberada, sin compromiso e independiente, probó ser irresistible.

Y sin embargo, la voluptuosa forma de Barbie se convirtió de inmediato en el blanco de críticas desde el comienzo. Muchos vieron en la muñeca un riesgo potencial para las mentes infantiles, una que alentaba visiones distorsionadas del cuerpo e incitaba a una sexualidad exacerbada.

A pesar de las críticas, Barbie se convirtió rápidamente en la muñeca mejor vendida de todos los tiempos, desatando innumerables réplicas e imitaciones, con diferentes grados de éxito.

Pero los creadores de Mattel decidieron que Barbie no debía estar sola. Pronto llegó una tropa de amigas para hacerle compañía, y en 1961 su novio Ken hizo su primera aparición. Después llegó su hermana menor, Skipper, un perro, un gato, un caballo y una hermana bebé - incluso gemelos.

La creciente familia necesitaba, por supuesto, una casa, un automóvil, una piscina, una interminable colección de set de juegos, e innumerables vestidos, zapatos y accesorios.

El universo de Barbie se expandió para incluir todo lo que una niña pudiera soñar.

Pero, a pesar de su éxito mundial, Barbie también ha tenido sus detractores.

Desde el comienzo, la curvilínea muñeca ha sido culpada de imponer cánones de belleza irrealistas, perpetuando inseguridades y estereotipos de género. Y sin embargo, esta crítica puede no tener fundamento.

Si esto es cierto sobre Barbie, también lo es acerca de los superhéroes y muñecos destinados a los niños, tales como ‘G.I. Joe’. Ambos ofrecen lo mismo : un modelo de adultez para que los niños se proyecten, reflejando sus propias esperanzas, sueños y expectativas para el futuro.

No se espera que los juguetes representen la realidad, sino que provean rienda suelta a nuestra imaginación y fantasía. Así, una muñeca feminina y bonita atraerá a las niñas que deseen tales características para sí mismas.

El problema, entonces, no reside en el juguete sino en los valores y expectativas entregados a los niños por sus padres, cuidadores y la sociedad en la que viven.

Simplemente jugar con una Barbie no hará que una niña sea vana e insegura, a menos que estas condiciones le sean influenciadas por el ambiente que la rodea.

En mi caso, recibí mi primera muñeca Barbie cuando era pre-adolescente, después que mi hermana mayor recibiera la suya. Pronto tenía una colección de ellas - Barbie Malibú, Barbie vaquera, Barbie Rapunzel, Barbie Hispánica, Barbie Italiana, el caballo de la Barbie, el perro de la Barbie, etc. - y cuando mi hermana se cansó de las suyas, las heredé con gusto.

Sin embargo, nunca me sentí coartada a lucir como ellas o ser como ellas en ninguna forma. Mis Barbies eran muñecas y yo era una persona real, y tales expectativas irrealistas no estaban presentes en mi ambiente.

Eventualmente, las dejé de lado al crecer, pero siempre recuerdo con cariño mis muñecas Barbie, las largas horas de entretenimiento que me dieron y las fantásticas historias que solía crear con ellas.

Algunas de mis Barbies

A través de los años, Mattel se ha mantenido sabiamente sensible a las críticas del mercado, la competencia, los cambios sociales y el vaivén de los tiempos.

De hecho, parte del secreto de la permanencia de Barbie en el tiempo es su constante re-invención y adaptabilidad para satisfacer los cambiantes paradigmas sociales.

En respuesta al naciente movimiento de conciencia racial de los años 70, y la necesidad de diversidad en el mercado de los juguetes, Mattel lanzó los primeros modelos de Barbie representando diferentes etnicidades, cuya línea mas notable fue llamada “Muñecas del Mundo”, la cual continúa hoy en día y es actualizada cada cierto tiempo, mostrando muñecas Barbie en trajes típicos, muchas de ellas presentando diferentes rasgos faciales.

Barbie Italiana (1979)

 Barbie Esquimal (1981)

 Barbie Chilena (2018)

 Barbie Mexicana (2019)

Este esfuerzo de conectar con sus clientes en un mercado global en expansión probó ser lucrativo, y hoy en día las Barbies que no son rubias y blancas representan más del 50% de sus ventas globales.

También, en un esfuerzo para contrarestar las críticas de grupos feministas acusando a Barbie de perpetuar prejuicios misóginos, y también como una forma de mostrar que Barbie no era sólo una ‘cara bonita’, Mattel lanzó Barbies realizando una variedad de ocupaciones que mostraran su inteligencia y espíritu emprendedor: Barbie doctora, Barbie científica, Barbie astronauta, Barbie candidata presidencial, y muchas otras.

Además de éstas, Mattel ha satisfecho a sus fans adultos al lanzar ediciones para coleccionistas honrando películas famosas, celebridades y personalidades, tales como Amelia Earhart, Frida Kahlo y Liz Taylor, e incluso a veces vestida por famosos diseñadores de moda, tales como Valentino, Oscar de la Renta, Karl Lagerfelt y Bob Mackie, con diseños creados específicamente para su figura.

Barbie “Lo que el Viento se Llevó”, Edición de Colección

 Barbies “Crepúsculo”, Edición de Colección

Últimamente, Barbie se ha esforzado mucho para demostrar que no es superficial.

En el 2018, Mattel presentó modelos de Barbie en sillas de ruedas y con una prótesis de pierna, destinadas a incluir a los niños con discapacidades. Más recientemente presentaron tres nuevos modelos de Barbie con figuras diferentes: petite (baja y menuda), alta, y de figura redondeada, con la esperanza de que las niñas se sientan identificadas y representadas por estos modelos, mostrándoles que la belleza existe en todos los tamaños, colores y formas.

En otro osado movimiento, Mattel incluso presentó el modelo de una Barbie usando una burka.

Aunque estas medidas han encontrado el beneplácito de clientes políticamente correctos, el éxito de estas versiones aún está por verse. Después de todo, son los niños quienes escogen los juguetes con los que juegan - aquellos que reflejan mejor sus sueños y expectativas.

Sin importar lo que pensemos sobre ella, Barbie es un ícono y un gran ejemplo de adaptabilidad a las necesidades del mercado, y de fortaleza en un mundo cambiante, siendo capaz de hacer frente a la despiadada competencia del voluble mercado de los juguetes al tiempo que permanece fiel a su espíritu original.

A sus 60 años, Barbie no es sólo una sobreviviente de tiempos de guerra, recesión, cambios sociales, trastornos económicos, tecnologías cambiantes y el salto a la era digital, sino que además lo ha hecho con una sonrisa, manteniendo su optimismo inquebrantable, juventud y espíritu dinámico.

A pesar de las épocas, Barbie permanece moderna, positiva, progresista, aceptando su lado femenino, personificando nuestros sueños de libertad, independencia, armonía y felicidad sin fin.

Un logro notable que sin duda merece una gran celebración.

Fuentes: Deutsche Welle, FranceInfo, Wikipedia.